domingo, 31 de agosto de 2008

Ternura

Me envuelve un sentimiento de ternura. La ternura misma. Pocas palabras con poco peso, la sonrisa en ellas las hacía hermosas. Así es como ese instante no pudo derribarse con nada, quedó solido e inmortal. Hizo desaparecer la desesperación, la necesidad, y encontró la cordura y el orden en mis pensamientos. Bueno no tanto, pero calmó un poco esa revolución indefinida que pasaba cual ráfaga por mi cuerpo cada vez que...

Y ahora, con la tranquilidad de no esperar soy capaz de disfrutar más las pequeñas cosas ¡Puedo ser feliz con tan poco!

Born to be wild.

Hay cosas que no puedo manejar todavía. Siempre tengo esa absurda manía de querer controlar todas las situaciones que me acontecen y a veces me superan aunque no sea el caso tengo la sensación de que mis manos se aceitan y todo tiembla en ellas. Las cosas quedan en el borde, a punto de caer, de romperse, de dañarse. Las atajo como puedo, hago malabares y cuando logro estabilizarlas las lanzo de nuevo.Soy conciente de lo complicado que es entender mis actitudes, pero hace falta solo mirar mis ojos para comprender lo que quiero decir. Así es como yo hablo. Un lenguaje complicado, impreciso y fuerte.
Qué se atreva quién quiera conocerme. Born to be wild. Las palabras suelen sobrar.