miércoles, 28 de abril de 2010

Simplemente seguía hablando de mi.

Hablo mucho, cada vez más. Lo curioso es que antes no era así. Solo los cercanos conocían mi voz. Escribía mucho mas de lo que hablaba. Momento: ahora que me detengo a pensar (en realidad hace rato que vengo elaborando este pensamiento en mi cabeza pero ahora va tomando forma) soy como una contra-parte de mi anterior yo. ¿Donde quedo la nena que aceptaba todo sin mayor explicación? ¿La buenaboluda que decía todo que si y nunca iba más allá? ¿Y la que se quedaba callada sin discutir? Esa criatura que lloraba a escondidas porque la trataban mal, que se portaba bien y hacia lo que tenia que hacer cuando lo tenia que hacer... ¿A donde se fue? Oh my god (Chandler Bing!) Soy totalmente opuesta a lo que era. Según mamá era dulce y ahora "fria como una roca" o "como el hielo", no sé, usó alguna de esas metáforas básicas.
Me fui moldeando simplemente (que A o T o D o H me expliquen por favor porque cuernos cada vez uso más esta palabra). Es lo que suele pasar cuando se va creciendo, el tema está en absorbí demasiado el exterior. Esto no quiere decir que haya copiado o extraído todo lo cotidiano, lo exterior, lo "normal". Sino que construí mecanismos de defensa para todo aquello que me lastimaba. Podría decir con el pecho inflado que me hice más fuerte yo solita (JA!). En algún momento, con la nariz entre los libros, me dí cuenta de que las cosas pueden ser de otra manera. Y que tal vez en algún sueño utópico (A otra vez) yo pueda cambiarlas. Tampoco es que me haya vuelto "fría y dura" (!!!) sino que aprendí (o me vi obligada a incorporar) a ser amorosa solo en los momentos que es ESTRICTAMENTE necesario. Luego llegó un punto en el cual lo suprimí por completo. Ahora intento sacarlo otra vez, de a poco, muy de a poquito.


Bueno, demasiada boludez (y demasiados parentesis) por hoy.


Extrayendo pequeñas pelotudeces de mi cabeza,

Clara (como el vidrio espejado de la ventana)

0 comentarios:

Publicar un comentario